Víctor Suárez

Putin dijo que había que resucitar Intervisión para contrarrestar a Eurovisión, festival musical internacional del que Rusia fue expulsada en 2022 tras su invasión a Ucrania. En efecto, anoche, en el Live Arena de Moscú, volvió a escena.

A Intervisión no se le veía en pantalla desde la era soviética (transcurrió entre 1965 y1980). Reapareció con nuevo soplo, mayores recursos técnicos y financieros, gran colorido y difusión. Y, sobre todo, con un gran premio al artista ganador montante en 30 millones de rublos (aproximadamente 310.000 euros). En contraste, Eurovisión no premia con dinero sino con fama.

Inicialmente estaba pautada la participación de 23 países, la mayoría pertenecientes al grupo BRICS. Pero al final el jurado deliberó sobre 21 actuaciones. El representante de Estados Unidos (Brando Howard), había desistido por “problemas personales”. Fue sustituido por Vassy, una cantante estadounidense con nacionalidad australiana, quien tampoco actuó, alegando “presión política sin precedentes” por parte del gobierno australiano, según los presentadores. Luego de su actuación, el ídolo ruso Shaman pidió al jurado que no lo considerara en sus debates por representar al país anfitrión. De manera que Rusia y EEUU no entraron en carrera.

Latinoamérica estuvo representada por Omar Acedo (Venezuela), Nidia Góngora (Colombia), Zulema Iglesias Zalazar (Cuba) y el dúo Tais Nader y Luciano Calasanza (Brasil).

Al sumar las papeletas, el ganador resultó Viet Nam. La cantante Đức Phúc y su canción titulada “Rey celestial de Phù Đổng”, se llevaron el botín.

El gobierno de Venezuela, que no es miembro de los BRICS pero sí aliado de Rusia, envió a Estelín “Poe” Polanco en calidad de jurado, y a Omar Acedo como participante en el concurso.

Al término de la función, se anunció que Arabia Saudita sería el anfitrión el año próximo.

ENCHUFADOS EN MOSCÚ

Polanco es un videógrafo dedicado, desde 2017, a la producción de audiovisuales para artistas venezolanos y extranjeros. Comenzó su carrera como diseñador gráfico. Ha trabajado para Gustavo Elis y Sixto Rein. Ha sido director de videos musicales para Neutro Shorty, Big Soto, Micro TDH, La Melodía Perfecta, Lunay, Noriel, Lenny Tavarez y el mismo Omar Acedo. Formó parte del equipo que llevó a Karol G a Venezuela en marzo del año pasado con su show “Mañana Será Bonito Tour”. Ha hecho videos para Andy Rivera (Colombia) y Ale Mendoza (Guatemala). También se le conoce como “El productor de los músicos enchufados”, en alusión a quienes organizan y se presentan en espectáculos financiados por el régimen venezolano.

El cantante designado fue Omar Acedo, un maracucho de 41 años que se acredita como cantante, actor, locutor y productor musical del género urbano, pero su verdadero galardón es el de haberse casado con Daniela Cabello, la hija del Número Dos del régimen, Diosdado Cabello.

Acedo comenzó en “Salserín” en 1998 hasta que este grupo se disolvió. En 2001, su proyecto “Nivel 3” fracasó. Ingresó a la agrupación “Bacanos”, de la cual se retiró. Formó parte de “Calle Ciega”, en sustitución de Nacho, hasta 2009. En 2010 recomenzó su carrera como solista, sin mucho éxito. Los tumbos se acabaron en 2020 cuando se casó con la hija de Cabello.

Anoche se le vio en el Live Arena de Moscú pleno de energía, robusto, con lentes oscuros, doblando su calipso “La fiesta de la paz”, lanzado en julio. Donald Trump, en ese momento, ya había firmado la orden de iniciar su operación caribeña contra el Cartel de los Soles, organización paraestatal presuntamente codirigida por su suegro.

Nadie puede celebrar la guerra.
Eso es mentira.
Lo que quieran lo quiero
con la mano arriba.
Esta vida es buena.
Sí vale la pena.
Vívela como quieras.
Esa es la manera.

El jurado contó 266 votos a favor de Acedo. La vietnamita había logrado 419. La Venezuela de los enchufados había quedado en el puesto 13 entre 21 países.

Uno de los mensajes en su canal en Youtube dice:

“Muy buena música, pero la letra cagó todo”