Maduro continúa copando policialmente todos los espacios públicos, instalaciones petroleras, plantas de generación eléctrica, carreteras. Los cuerpos de seguridad se han instalado hoy en los alrededores de Miraflores, el ejército exhibe su poder de fuego, los “colectivos” amedrentan a los ciudadanos, Petare amaneció militarizado, el sheriff del ministerio público ha cundido aeropuertos, puertos y puntos fronterizos con carteles con orden de captura contra el presidente electo Edmundo González y ofrecimiento de recompensas a quien delate su presencia en el país. A contrapelo, Erick Prince, jefe del grupo de seguridad Blackwater, ha publicado una recompensa de 100 mil dólares a quien entregue “bien amarrado” a Tarek William Saab en aguas internacionales.

Como en las clásicas películas de vaqueros del lejano oeste.

El gobierno ha tratado de movilizar a sus antiguos seguidores, pero no lo ha logrado. El show musical organizado para recibir el Año Nuevo en Caracas, fracasó estrepitosamente.

En la oficina de protocolo oficial deben estar halándose los pelos porque la larga lista de invitados a su toma de posesión (usurpación), se ha quedado fría. Hasta ahora, ningún jefe de Estado o de Gobierno ha confirmado que aparecerá en esa foto. En 2019, solo asistieron 4 presidentes (Bolivia, Cuba, El Salvador y Nicaragua). Fuera de América, estuvieron los de Osetia del Sur y Abjasia, dos países que ni siquiera son reconocidos por la ONU.